Desmesura – Osvaldo Víctor Fernández

En este nuevo libro de Osvaldo Víctor Fernández, el poeta intenta traspasar los límites, amalgamando el sueño con las actividades cotidianas, buceando en los abismos, excavando en el vacío, interrogando al cosmos, sopesando las dos caras de las cosas, el yin y el yang, la máscara y la esencia. Es una poesía del silencio, de búsqueda metafísica, con versos breves, sin puntuación, donde aparece el murmullo de un balbuceo mediante el cual se tantean las respuestas, y donde ninguna respuesta es concluyente. Tienen un rol fundamental los elementos primordiales de la vida: tierra, fuego, aire, agua, siendo aquí el fuego el que intenta “apagar este océano”, ese mar de inconciencia que nos rodea. Aparece también, como un planteo recurrente en el trabajo de este poeta, una interrogación sobre el rol del escritor, del poeta como demiurgo, como creador de mundos hechos de palabras, como una especie de médium que es escrito por la luz. Hace mención de la “palabra mal-dita”, de ese concepto de decir mal que elabora Díaz Mindurry en La maldición de la literatura, ese maldecir que transciende las reglas del lenguaje, que provoca ruptura desde el atrevimiento de su desmesura, y que se transforma en un decir bien, en una bendición, al emplearse para producir literatura. Osvaldo Víctor Fernández considera al universo como “una especie de sacralidad” que lo espera “en la mitad del destino”, ese destino que trasciende por medio de la escritura. El libro tiene un tono por lo general elegíaco, con elementos emblemáticos como “espejos”, “pájaros”, “mariposas”, “noche”, que van amplificando sus significados por reverberancia entre un poema y otro. Igual que el “ángel” recurrente que remite al de Rilke y a las “cenizas” que hacen eco de la poesía de Paul Celan. Un libro como un espejo que refleja otros libros, otros espejos, otros universos. Un libro en el que se busca la desmesura de “un poema letal”, aunque Fernández bien sabe que “nada es definitivo / ni siquiera / el vacío”. – Eugenio Polisky