Manuel Horacio Torres
Nací en una ciudad.
Crecí. Viví. Aprendí. Desaprendí.
Sufrí. A mi pesar, hice sufrir. Amé. Partí. Traté (en vano) de andar sin pensamiento.
En fin, parafraseando a otro que admiro: “cuando vuelvo la cabeza hacia atrás, muchos años han pasado, y todo me parece tan fugaz como un sueño”.
Poemas y cuentos madurados a fuego lento, que indagan, a su manera, en el amor, la soledad, los celos, la fragilidad de los cuerpos y los sueños. Textos no exentos de humor, cuando cuadra, y certero realismo
Infancia y vejez, tiempo y deseo, y ese constante asombro: por lo que nos rodea; por estar vivos simplemente bajo el oro del sol. ¿No es él acaso, el gran motor de lo poético?