¡No te cases sin antes firmar un acuerdo prenupcial! – Lucina Luz

Firma un acuerdo prenupcial o te arrepentirás… Desde ruidos molestos y olores nauseabundos, pasando por la galería de pelotas de todo tipo tamaño y color… Uso y abuso del control remoto monopolizado por el consorte. Hasta la elección del destino de vacaciones. ¿Si seres alérgicos a la arena y el viento hace estragos en tu hermosa cabellera, o no soportas alturas máximas a los 15 centímetros de un escalón, o 20 sobre el nivel del mar…? Vacaciones en familia, fiestas de navidad… Tienes que hacer un contrato con todos estos ítems pactados, discutidos y consensuados antes… Después… No hay reclamos. Diviértete viendo como los dos o tres primeros años son todo: si querida… Y luego el maravilloso esposo se transforma en un energúmeno desconocido que hasta olvida el aniversario de bodas. Algunas sugerencias prácticas. Pongan un poquito de humor, un contrato satisfactorio para ambos. Podrán acordarlo con alegría. El amor todo lo puede.